Como hacerte querer

-No contradecir por sistema a todos los que hablan con nosotros.
-Exponer nuestras razones en las discusiones, pero sin tratar de apabullar.
-Mandar en tono suave, sin gritar.

-Corregir de modo que se note que te duele hacerlo.
-Aprender los nombres de las personas con las que trabajas o de las que nos cruzamos por el camino cada día y tratarlas luego por su nombre.
-Estudiar los gustos ajenos y tratar de complacerlos.
-Pensar bien de todo el mundo, por principio.

-Tener la manía de hacer el bien, sobre todo a los que no lo merecen teóricamente.
-Sonreír. Sonreír a todas horas. Con ganas o sin ellas.
-Multiplicar el saludo, incluso a los semiconocidos.
-Visitar a los enfermos, sobre todo si son crónicos.
-Prestar libros aunque te pierdan algunos. Devolverlos tú.
-Hacer favores. Y concederlos antes de que terminen de pedírtelos.

-Olvidar las ofensas. Y sonreír especialmente a los ofensores.
-Aguantar a los pesados. No poner cara de vinagre al escucharlos.
-Tratar a los antipáticos. Conversar con los sordos sin ponerte nervioso.
-Contestar, si te es posible, todos los correos.
-Entretener a los viejos. No engañarlos como chiquillos, pero subrayar todo lo positivo que encuentres en ellos.

-Recordar todas las fechas de cumpleaños y santos de los conocidos y amigos.
-Hacer regalos pequeños, que demuestren el cariño pero no creen obligación de ser correspondidos.
-Acudir puntualmente a las citas, aunque tengas que esperar tú.
-Contarle a los demás las cosas buenas que otros han dicho de ellos/as.
-Dar buenas noticias.
-Resaltar los éxitos y justificar los fracasos de los demás.
-Ser cortés con todos.

Fuente : Ciudadfutura

Como hacerte querer

-No contradecir por sistema a todos los que hablan con nosotros. -Exponer nuestras razones en las discusiones, pero sin tratar de apabullar. -Mandar en tono suave, sin gritar. -Corregir de modo que se note que te duele hacerlo. -Aprender los nombres de las personas con las que trabajas o de las que nos cruzamos por el camino cada día y tratarlas luego por su nombre. -Estudiar los gustos ajenos y tratar de complacerlos. -Pensar bien de todo el mundo, por principio.

-Tener la manía de hacer el bien, sobre todo a los que no lo merecen teóricamente.
-Sonreír. Sonreír a todas horas. Con ganas o sin ellas.
-Multiplicar el saludo, incluso a los semiconocidos.
-Visitar a los enfermos, sobre todo si son crónicos.
-Prestar libros aunque te pierdan algunos. Devolverlos tú.
-Hacer favores. Y concederlos antes de que terminen de pedírtelos.

-Olvidar las ofensas. Y sonreír especialmente a los ofensores.
-Aguantar a los pesados. No poner cara de vinagre al escucharlos.
-Tratar a los antipáticos. Conversar con los sordos sin ponerte nervioso.
-Contestar, si te es posible, todos los correos.
-Entretener a los viejos. No engañarlos como chiquillos, pero subrayar todo lo positivo que encuentres en ellos.

-Recordar todas las fechas de cumpleaños y santos de los conocidos y amigos.
-Hacer regalos pequeños, que demuestren el cariño pero no creen obligación de ser correspondidos.
-Acudir puntualmente a las citas, aunque tengas que esperar tú.
-Contarle a los demás las cosas buenas que otros han dicho de ellos/as.
-Dar buenas noticias.
-Resaltar los éxitos y justificar los fracasos de los demás.
-Ser cortés con todos.

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Fuente : Ciudadfutura