11 de Septiembre de 2017- Lunes

AL PRACTICAR EL PERDÓN, ABRO EL CAMINO PARA QUE EL AMOR FLUYA.

Cuando el cauce de un río es obstruido, a la larga, el agua sobrepasa el obs- táculo. Tal como un río, mi energía fluye fácilmente y sin esfuerzo hasta que enfrento una situación que causa bloqueo mental o emocional.

En esos momentos, hago una pausa y evalúo la situación. Observo mi vida y energía como si estuviera sentado a la orilla de un río. ¿Hacia dónde fluyo? ¿Qué siento? A menudo, el bloqueo puede ser eliminado mediante el perdón y el amor. ¿Hay una oportunidad en este momento de perdonar? ¿De amar?

Identifico dónde puede suceder un cambio y digo palabras sinceras de liberación. Siento que el obstáculo mental se disipa. Al practicar el perdón, abro el camino para que el amor fluya.

1 Juan 4:12  Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros, y su amor se perfecciona en nosotros