19 de Septiembre de 2018- Miercoles

Curación

EN MENTE, CUERPO Y ESPÍRITU, SOY SANO Y PERFECTO.

En la Biblia leemos que Jesús les dijo a las personas que su fé las había sanado. Ellas progresaron gracias a sus intenciones y a su voluntad de ser sanadas. Cuando algo en mi vida parece estar fuera de orden, comienzo mi proceso de curación observando la situación —sin juicio, temor, preocupación o ansiedad.

Abro mi mente para recibir la dirección claramente y afirmo orden divino. La curación se lleva a cabo con o sin mi permiso, sin embargo, avanza más rápida y libremente con mi atención y cooperación.

Intercepto cualquier pensamiento negativo acerca de mi curación y lo dejo ir. Lleno mi mente con la maravilla de la inteligencia divina que fluye en mi cuerpo. En mente, cuerpo y espíritu, soy sano y perfecto.

Mateo 9:22  Pero Jesús se volvió a mirarla y le dijo: “Ten ánimo, hija; tu fe te ha salvado”.