26 de Abril del 2012 - Jueves

Armonía

Soy uno con el amor armonizador de Dios.

Cuando pienso en la palabra armonía, pienso en Dios, porque toda armonía proviene de Dios. Se encuentra en el subir y bajar del océano, en una brisa suave entre los árboles, en el latido rítmico de mi corazón. La armonía de Dios se ve en el movimiento de una bailarina de ballet, en los colores del arco iris, en la vasta expansión de las estrellas en el cielo.

Si siento que las situaciones en mi vida no son afables, recuerdo que el balance de Dios está “en todo y por medio de todo”. Pienso más allá de cualquier situación que me preocupe y recuerdo que el amor de Dios obra en todo lo que veo, hago y siento. Descanso en la conciencia divina y siento que la armonía me envuelve y llena mi mundo de paz.

Un solo Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos y por todos y en todos.—Efesios 4:6