Cerezas

cerezasLas cerezas son frutas de alto contenido vitamínico, contienen Vitamina A, B, C, además portan gran cantidad de hierro, calcio, potasio, sodio, magnesio, fósforo, azufre y silicio.

El color rojo subido, es debido a la gran concentración de hierro en su composición, por ello es muy apropiado para aquellas personas que pasan por etapas de anemia o faltos de minerales en la sangre.

Existen gran variedad de cerezas, pero todas tienen propiedades curativas. Algunas son de color rojo rubí, y ellas son muy buenas para tratar el reumatismo, gota, y enfermedades arteriales.

Esta fruta siempre fue muy apreciada por sus cualidades y su uso se ha extendido en infinidad de preparados, pues su característico sabor hacen de la ella una fruta sumamente apreciada y excelente para la salud.

En el organismo humano tienen una acción altamente benéfica, pues contribuye como toda fruta al desarrollo integral del sistema inmunológico y al crecimiento normal en los niños.

Las vitaminas y minerales que poseen ayudan muchísimo al buen rendimiento y fortalecimiento de las funciones cerebrales, contribuye a la buena memoria, vitaliza todo el organismo regenerando las funciones excretoras y sanguíneas.

Esta fruta siempre es bueno comerla una hora antes o una hora después de las comidas, pues de esta manera se asimilará mucho mejor y no interferirá con los procesos digestivos creando sensaciones molestas.

Las sustancias contenidas en las cerezas hacen que disuelvan impurezas del organismo, expulsando el ácido úrico del mismo, pues tiene una acción depurativa de primer orden en la sangre y el organismo en general.

De los cabillos de las cerezas se obtiene un té que tiene una acción muy específica en:

Resfríos, catarros, tos convulsa o convulsiva, pulmones, bronquitis, cistitis, anemia, ictericia, enfermedades de la garganta.

Comer diariamente cerezas, por un lapso de 10 días tendrá buenos efectos en casos de obesidad, cuidando, lógicamente una dieta sana. Asimismo, tomar un té de cabos de cerezas y comer la fruta diariamente puede prevenirse de las enfermedades antes expuestas.

Antiguamente, las pepitas tambien eran aprovechadas en casos de problemas urinarios o cálculos, comiendo 5 pepitas por día. Esto hará que el organismo expulse mediante la excrecion de orina las sustancias pesadas y nocivas, disolviéndolas y purificando la sangre. Asimismo, con las pepitas ingeridas pueden tratarse parasitosis intestinales en los adultos.

No se olvide del gran poder curativo de las cerezas, puede prepararlas como le guste, pero trate en lo posible de no quitarle a través de cocciones intensas el gran poder vitamínico y mineral que poseen, busque la manera de hacerlas más agradables y conservarlas en su estado más natural. Verá que las cerezas pueden ser grandes aliadas cuando se trate de defender su salud.

Fuente : Ciudadfutura