No tengo que saber mucho de música para saber que la armonía puede convertir una melodía sencilla en una sinfonía. Puede establecer un coro magnífico y hacer que la música folklórica llegue al corazón.

Cuando dos o más personas armonizan, no cantan la misma nota. Las notas diferentes, pero complementarias, crean un sonido más interesante —ésa es la definición misma de armonía.

Así que al desear experimentar más armonía en mi vida, ya no insisto en que otras personas sean como yo o vean la vida de la misma manera. Nuestras diferencias pueden ser armoniosas si estamos dispuestos a estar a tono unos con otros. Aprecio los sonidos diferentes de la humanidad, y juntos creamos una melodía que transciende diferencias.